Las gasas no estériles son un tipo de apósito o vendaje que se utiliza en diferentes campos de la medicina, incluyendo la odontología. A diferencia de las gasas estériles, las gasas no estériles no han sido sometidas a un proceso de esterilización y, por lo tanto, no se consideran libres de microorganismos.

Estas gasas están fabricadas con tejido de algodón o materiales no tejidos y se presentan en forma de cuadrados o rectángulos. Son suaves, absorbentes y se utilizan para diversas aplicaciones en odontología, como la limpieza de heridas, la aplicación de medicamentos tópicos, la protección de áreas sensibles o la absorción de fluidos.

Las gasas no estériles también se utilizan en el campo de la odontología para diversas aplicaciones. Aunque no  adecuadas para entornos quirúrgicos, pueden ser útiles en procedimientos dentales no invasivos y para ciertas tareas de limpieza y absorción.

Algunos usos comunes de las gasas no estériles en odontología incluyen:

1. Absorción de saliva: Durante los procedimientos dentales, las gasas no estéril pueden utilizarse para absorber la saliva y mantener un campo seco, permitiendo un mejor acceso y visibilidad.
2. Limpieza de la cavidad oral: Las gasas no estéril son útiles para limpiar la cavidad oral antes de procedimientos como la toma de impresiones dentales, la aplicación de materiales de restauración o la colocación de bandas ortodónticas.
3. Aplicación de productos tópicos: Pueden utilizarse para aplicar soluciones tópicas, como antisépticos o anestésicos locales, en áreas específicas de la boca.
4. Protección de áreas sensibles: En casos en los que se necesita proteger tejidos o áreas sensibles, las gasas no estéril pueden utilizarse como barrera o como amortiguador para evitar lesiones o irritaciones.